Las "Houses of Parliament" de Londres, sede del Parlamento británico
Este jueves 7 de mayo, el Reino
Unido celebra elecciones parlamentarias, en las que se elegirá a los miembros
del Parlamento británico y al primer ministro. Las encuestas muestran un empate
entre las dos principales fuerzas tradicionales, el Partido Conservador, en el
poder desde 2010, y el Partido Laborista, aunque se producirá sin duda un
crecimiento exponencial de partidos pequeños que ante el bloqueo parlamentario
serán clave a la hora de garantizar un gobierno estable para el país. Sin
embargo, en España, el desconocimiento al respecto de esta cita con las urnas
es grande. Por tanto, éstas son las preguntas y respuestas básicas sobre estas
elecciones:
¿Qué se elige en estas elecciones?
650 miembros del Parlamento británico,
y al primer ministro. El Parlamento se renueva completamente.
¿Con cuántos escaños se puede formar un gobierno?
Normalmente basta con tener una
sólida mayoría, no es necesario llegar a la mayoría absoluta, que actualmente
es de 326 MP’s (Member of Parliament). Sin embargo, como es lógico, cuantos más
escaños mejor.
¿Quién tiene derecho a voto?
Todos los ciudadanos mayores de
edad de los países que forman el Reino Unido, es decir, Inglaterra, Escocia,
Gales e Irlanda del Norte.
¿Cuál es el sistema de reparto de escaños?
El sistema británico es de
circunscripción uninominal. Existen 650 circunscripciones, y por cada una es
elegido un miembro del Parlamento. Cada diputado debe luchar por mantener su
escaño, pudiéndose generar la situación de que un partido gane las elecciones,
pero su líder no sea elegido diputado, porque haya perdido en su
circunscripción. El actual viceprimer ministro, Nick Clegg, está en serio
riesgo de perder su escaño en estas elecciones.
¿Cuáles son los partidos contendientes?
En Gran Bretaña, solamente dos
partidos han gobernado como formación principal: el Partido Conservador, o ‘tory’,
que ganó las elecciones de 2010, aunque sin mayoría absoluta; y el Partido
Laborista, en la oposición desde entonces, aunque gobernó recientemente con
Tony Blair y Gordon Brown.
Sin embargo, siempre ha habido en
el país una fuerza política menor que ha tenido suficientes escaños para garantizar
un gobierno. Desde 2010, el Partido Liberaldemócrata sostiene al gobierno
conservador. En estas elecciones, según los sondeos, la formación clave para el
futuro político del país será el Scottish National Party (SNP), partido
independentista escocés que obtendrá alrededor de 50 escaños en el próximo
Parlamento.
Asimismo, es importante el United
Kingdom Independent Party (UKIP), vencedor de las elecciones europeas, y que a
pesar de su aparente pujanza, no obtendrá más de 5 escaños en las elecciones, y
no podrá condicionar el ejecutivo que salga de las urnas.
¿Quién tiene las de ganar en las elecciones?
El empate técnico es el resultado
más reflejado en los estudios de opinión, con ligeras ventajas conservadoras o
laboristas. En proyección de escaños, ganan los conservadores, aunque no por
mucho. Todas las encuestas coinciden en señalar además una amplia bajada de los
liberaldemócratas, que pagarán el pato del acuerdo de coalición con los ‘tories’,
una sólida renta del SNP, y la insignificancia del UKIP.
¿Quiénes son los principales candidatos?
Gran Bretaña ha logrado una
renovación de caras políticas en los últimos años, ya que ninguno de los tres
principales candidatos llega a los 50 años. El actual primer ministro, David
Cameron, ha logrado recuperar gran parte de su prestigio perdido con algunas
acciones de gobierno bastante populares, y no se ha hundido del todo, aunque le falta el atractivo de hace 5 años.
El líder laborista, Ed Miliband,
es un perfecto desconocido incluso para sus propios conciudadanos. Fue elegido
líder del Partido Laborista en 2010, tras la derrota electoral, y tras vencer
en las primarias a su propio hermano, David. Sin embargo, no resulta un
candidato atractivo, a pesar de que hoy por hoy, es el que más opciones tiene
de convertirse en primer ministro después de estas elecciones.
Nick Clegg, viceprimer ministro y
candidato liberaldemócrata, ha dejado de ser un candidato atractivo para
muchos, y su partido ha perdido mucha credibilidad como partido independiente,
ya que ha suscrito las principales decisiones del Partido Conservador. Sin
embargo, es indiscutible como líder de su partido, y solamente una contundente
derrota le alejará del mando.
La revelación de estas elecciones
será Nicola Sturgeon, ministra principal de Escocia tras la dimisión de
su antecesor, Alex Salmond, a raíz de la derrota en el referéndum de
independencia, y para muchos la mejor opción. Su partido crecerá en Escocia a
costa de los laboristas, tradicionalmente hegemónicos en esa zona, pero que
perderán casi todos sus escaños a manos del SNP.
El gran olvidado de estas
elecciones parece ser Nigel Farage, presidente del UKIP, eurófobo y
ultraderechista, que está en una situación parecida a la de Clegg, es decir,
indiscutible en el partido, pero sin mucha relevancia en la política. Cameron
está intentando triangular, consciente de que muchos de los que votaron al UKIP
en las europeas son tradicionalmente conservadores, y ello castiga a Farage.
¿Qué ocurre si después de las elecciones no hay una mayoría clara de
ningún partido?
Ocurre lo que se llama ‘hung
parliament’, una situación de bloqueo en la que es necesario un pacto de
coalición para garantizar un gobierno. El actual Parlamento fue de este tipo.
¿Cuál es el escenario más probable después de las elecciones?
Como siempre, decidirán los
resultados. Sin embargo, a primera vista, parece que hay tres grandes
posibilidades. La primera es una reedición del actual pacto de gobierno, algo
que parece harto improbable por el hundimiento de los liberaldemócratas. La
segunda es un acuerdo entre laboristas y SNP, algo contra lo que Miliband se ha
manifestado repetidamente, pero que parece lo más posible, puesto que Sturgeon
ha dejado claro que no favorecerán un gobierno ‘tory’. En ésta podrían participar incluso los liberaldemócratas. La tercera sería un
gobierno en minoría de los conservadores, si éstos obtienen un resultado
positivo. Hoy por hoy, tal y como se plantea la situación, la opción más probable es la segunda.
¿Qué ‘issues’ condicionarán el voto?
Como en todas las elecciones, la
situación económica será muy importante a la hora de decidir el voto. El Reino
Unido tiene una tasa de desempleo del 5’5%, sin embargo, el gobierno
conservador ha aplicado importantes recortes y medidas de ajuste que pueden
tener un coste electoral. Asimismo, los laboristas han hecho bandera de la
defensa del Sistema Nacional de Salud, prometiendo reforzarlo, frente a los
intentos de externalización de los ‘tories’, y poniendo el asunto sobre la
mesa.
Cameron, en un guiño a los
votantes más desencantados con la Unión Europea, prometió antes de la campaña
que, si era reelegido, convocaría un referéndum antes de 2018 en que se
sometería a decisión popular la permanencia en la UE. El primer ministro
también ha prometido un recrudecimiento de la política migratoria. Todo esto
tendrá evidentemente un peso importante, como también el pasado referéndum
escocés, en el que venció el “no” a la secesión, pero tras el cual no se han
producido las transferencias de competencias prometidas por Cameron. Este
descontento lo ha capitalizado el SNP, y será clave para su crecimiento en el
próximo Parlamento.
Un sondeo del Mirror acerca de
cuáles debían ser las prioridades del próximo ejecutivo británico muestra que
un 35’4% de los ciudadanos creen que debe ser el Sistema Nacional de Salud, un
31’3% opina que son los asuntos sobre Europa y la inmigración, y un 24’8% se
decantan por la economía.
¿Cuál es la preferencia política de las ‘celebrities’?
Las principales figuras de la
farándula británica se han aliado con el Partido Laborista, algunos de ellos,
como el físico Stephen Hawking, desde hace mucho tiempo. Los actores Martin
Freeman, David Tennant, Jason Isaacs y Steven Coogan, el humorista Stephen Fry,
o el columnista Owen Jones, principal figura del movimiento de nueva izquierda
británico, votarán a Miliband. El también actor Daniel Radcliffe, conocido por
dar vida a Harry Potter en las películas de la saga, ha cambiado a los
liberaldemócratas, a los que apoyó en 2010, por los laboristas.
Los ‘tories’ tienen mucho apoyo
de empresarios y de los rotativos más importantes del Reino Unido. El ex –
alcalde de Nueva York Michael Bloomberg es la principal figura que apoya a
David Cameron. En cuanto a sus socios de gobierno, tienen un ‘endorsement’ muy
importante, el del actor de los Monty Python John Cleese.
¿Qué ocurre después de las elecciones?
Los resultados se esperan entre
la tarde – noche del jueves y la mañana del viernes. Una vez confirmados, se
iniciarán las negociaciones para formar gobierno. Hasta que no haya un acuerdo
formal, el antiguo ejecutivo continuará en sus funciones, y David Cameron tiene
permiso para seguir viviendo en el número 10 de la londinense Downing Street,
sede del gobierno. Una vez exista un acuerdo parlamentario firme, el candidato
a primer ministro será llamado a Buckingham Palace por la reina Isabel II,
quien, en una reunión privada, le encomendará la formación de un nuevo
gobierno.
ABOUTME
Periodista y comunicador politico que quiere aportar una vision diferente de la politica internacional en todos sus escenarios, fuera de las noticias mas publicadas en los medios clasicos. En activo desde diciembre de 2014, siempre estamos reinventandonos para ofrecer la mejor informacion y la mas interesante.
0 comentarios:
Publicar un comentario